Un
sabio abuelo indígena, de una tribu del Amazonas, charlaba con sus
nietos a la orilla del rio acerca de la vida. Uno de ellos le pidió al
sabio anciano que compartiera su sabiduría y que les enseñase lo más
importante sobre la vida, de modo que fuera fácil de entender para los
niños.
Él
les dijo: - ¡Una gran pelea está ocurriendo dentro de cada ser
humano!... ¡Es una larga pelea entre dos lobos! Uno de los lobos es
temor, ira, envidia, orgullo, dolor, rencor, desilusión, avaricia,
culpa, resentimiento, inferioridad, egolatría, competencia, limitación,
desconexión...
-El
otro lobo es Sensibilidad, Bondad, Alegría, Paz, Amor, Identidad,
Honestidad, Esperanza, Serenidad, Humildad, Dulzura, Amistad, Fidelidad,
Entusiasmo, Generosidad, Benevolencia, Perdón, Empatía, Verdad,
Valoración, Compasión, Reconocimiento, Aceptación, Fe...
- ¡Y Esta misma pelea está ocurriendo dentro de nosotros y dentro de todos los seres humanos!
Los nietos pensaron por un minuto y uno de los niños le preguntó al gran abuelo sabio:
- ¿Y cuál de los dos lobos crees que ganará la pelea? A lo que el abuelo simplemente respondió...
¡El que alimentes!
Los lobos siempre son asociados a temas espirituales. Por algo son animales totémicos, y constamente se le atribuyen características humanas.
Hace unos años, un día muy negro, comencé a leer un libro que, por qué no decirlo, cambió mi vida.
"El lobo estepario" de Hernann Hesse.
Es un libro muy complejo, repleto de simbolismo e ideas alocadas. El personaje vive luchando contra lo cotidiano, es incomprendido por la mayoría, llega a ser fascinante sus palabras y su silencio. Da frescura a la manera de sentir las cosas; y teniendo en cuenta que es un tipo de alrededor de 40 o 50 años, donde muchos dirían que las personas empiezan el descenso, para él no, al contrario, todo tiene nueva luz, donde el alma goza de los detalles y es capaz de seguir creciendo, bajo las arrugas y las canas. Es un tipo digno de admirar, y estudiar. Harry, el lobo estepario, como él mismo se definió.
Por qué eligió un lobo?
Difícil pregunta.
Pero ciertamente, es un símbolo potente, de encierra algo de miedo y respeto, autosuficiencia y soledad. Calculador, quizás metódico, pero disfrutando de los placeres.
Una vez soné con el Lobo, y en mi sueño, él sólo me miraba y me rondaba. No me daba miedo su cercanía, más bien calma; el lobo gris de mi sueño, en el fondo, era yo. Una proyección de mi alma, y desde ese día, tomé al lobo como mi tótem. Porque era yo.
Este breve cuento que leí unos años atrás, es una verdad absoluta de la humanidad. Uno es quién desea ser. Yo soy el punto de partida, y solo uno puede decidir hasta donde llegar. Los límites son personales, uno decide si alimentar su fe, o el miedo.
Quizás no sea una dualidad absoluta, donde sólo uno gane. Hay momentos donde el lobo negro se impone y logra dominar, y otras donde el blanco trae bendición y paz.
La verdad la llevamos dentro, y no dejemos que nadie nos imponga otra. Si somos de tierra, no vivamos mirando el cielo, o más bien, temiendo al cielo, o lo que podría haber bajo la tierra.
Aprendamos a convivir con ambos lobos, seamos grises, unos seres completos, de luz y oscuridad. No neguemos nuestra naturaleza, hay que vivir con ella, no reprimirla.
Eso pienso, y quizás no me lleve a ningún lado. Pero vivo sin miedo, ni voy a dejar que alguien siembre la incertidumbre en mi. Las dudas las planteo yo, y sólo yo seré responsable de aclararlas. No dejaré que nadie me diga cómo pensar ni como actuar. Soy un sistema completo e independiente, un organismo libre, una mente errante.
Por qué un lobo?
Que sé yo, sólo sé, que así soy.
